Seamos unos CABRONES, que estas "musas" entiendan de una puta vez que sin nosotros no son NADA, que si no fuera por nuestro dinero adiós ropa cara, drogas y pagar laa cuentas del hijo que les dejó el pastabasero.
Nada de pedirles por favor, nada de llegar con regalitos o florcitas huevonas. Es nuestro dinero el que les dejamos en el velador o el que se lleva la cabrona. Y por ese dinero tenemos derecho a lo que queramos.
Ya está bueno de cabronas empoderadas. El dinero es poder, y esd poder es NUESTRO.