Un Peluquero tenía en la ventana de su negocio un Lorito, y el loro weón a mina que pasaba le decía "Hola Maraca"...
En esto había una mujer que todos lo días debía pasar por la Peluquería y ya estaba chata que el Loro la saludara tan Groseramente, un día ella se cansó y le dijo al dueño de la Peluquería... y como castigo el Peluquero lo pintó de Negro...
Al otro día pasó la mujer por la peluquería y el Loro no dijo nada, viendo al loro todo pintado de Negro la mujer se devuelve y con tono burlesco le dice: "Uy que pachó, por qué tan calladito?"
El Loro le contesta: "Es que cuando estoy de Smoking, no hablo con Maracas qlias"...