Saludos a los antiguos y a los de paquete (no piensen mal, jo jo jo).
Reporto poco ya, por lo rutinario del menú cafetero, pero sigo igual de cochino… Es así como conocí a Claudia. Ella tiene cabello claro, ajustado a mechones rubios con alguna mano de gato; tititas chicas con pezones rosados y muy eréctiles. Es de contextura gruesa pero para nada gorda, más bien delgada.
Haciendo justicia a la verdad les diré inmediatamente los puntos negativos: tenía una brisa marina allí abajo, pero nada de qué preocuparse, estoy un 99% seguro que era una respuesta femenina natural a los últimos días del período reproductivo. Ella puede ser intimidante, le gustan las nalgadas y mordiscos con cuática, pero si saben manejar la situación, definitivamente es muuuy agradable.
Lo central es su atención, puedes degustar todos sus atributos desde el primer consumo… Ufff la chica es una brasa, por lo mismo, desistí de probar ciertos manjares porque no quise ni saber cuántas manos y bocas habían pasado por donde mismo (sigo igual de cochino, pero ahora estoy un poquito más tiquis-miquis).
Lo mejor de su atención, es verla como recorre el banano con su lengüita mientras te embruja con su visión de cocodrilo. Otro punto fuerte es que le gusta fuerte, al menos conmigo no se hizo ningún atado, de hecho empecé suavecito, pero me obligó a aplicarle caricias bastante extremas… Lo bueno que no las aplica de vuelta, a menos que tú las pidas.
La atención terminó con un tercer consumo, siete dedos míos introducidos en sus agujeros y su lengüita en el que te jedi.
Esto queda en una clásica galucha cochinona en donde los pisitos re-cagan. Más datos, ya tú sabes.
Saludos, desde mi retiro literario.
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