Tengo una Fantasía...

Siglo XVI, en El Congo.
El Padre John Fòquin está entregando la palabra cristiana, mientas siniestramente oculta sus perversiones y mantiene encerrada a Bella Antonia en un convento.

El padre termina su "ardua" jornada, y lleva a la iglesia el oro, animales y joyas; ruinmente obtenidos, timando a los negritos. Su enorme panza y su risa con dos dientes menos, causan terror en la población.

Llega el curita a la iglesia, y logra ver una sombra ágil y escucha risas en su alcoba. Entra en la habitación y nota gran movimiento debajo de las sábanas. Gritos y jadeos le confunden, pues nunca había escuchado gritar así a una mujer de felicidad.

De pronto, la sábana vuela por los aires, Chondo trepa hasta la ventana en arco, pero antes le quita el producto de los robos al cura. Bella Antonia sale de las sábanas con la cara llena de risa y le dice al cura: No es lo que piensas.

A lo lejos, se ve a Chondo repartiendo las riquezas con Valo, su fiel servidor.