Coincido con lo señalado.

Yo no siento ninguna pena ni compasión por los presos fallecidos, ellos tampoco sintieron ninguna pena ni compasión por las víctimas de sus delitos...el mundo es un lugar mejor sin esos 81 delincuentes e inadaptados sociales.

En cuanto a la infraestructura carcelaria, también me opongo a que con nuestros impuestos, fruto de NUESTRO TRABAJO, se mejoren las condiciones de los penales. Creo que las cárceles debieran ser aun mas brutales y terribles de lo que son hoy en día, al estilo gulag de la ex URSS, para quien decida ponerse al margen de las reglas de convivencia social, la cárcel debe ser un castigo doloroso y ejemplarizador para quien dedica su vida al delito.

Sin embargo creo, eso si, que debiera haber penales especiales para delitos menores y para aquellos que delinquen por primera vez, con objeto de darles la oportunidad de rehabilitarse y no mezclarlos con los delincuentes avezados, a quienes debe mantenerse en un penal lo mas brutal y horroso posible, para que PAGUEN el daño que han hecho a inocentes.