ayer pude llorar...
en tú despedida meditar,
con el rostro inferir...
para adentro transgredir.

ayer te vi pasar...
desnuda, sin avatar,
ninguna musa quiso dejar...
su huella en mi deambular.

ayer no vi tus ojos...
ni toqué los labios sabrosos,
en aquel instante mÃÂ*nimo...
sin abrazos ni vino.

ayer fue última vez...
con tú aliento en la tez,
como suspiro en temporal...
tú compañÃÂ*a dejó mi lar.